1 de julio de 2010

Reconocimiento en los BET Awards

Mi "despreocupación" por Prince en los últimos tiempos me ha llevado un poco a perder la perspectiva de su carrera cronológica. No sé muy bien cuantas apariciones lleva ya en los BET Awards en los últimos años. El caso es que para este le han dado un premio honorífico por su carrera y le han rendido un cariñoso homenaje.

Estos premios a la música negra han traido al escenario a algunas divas del R&B en su tributo a Prince en una entretenida actuación donde el artista se hace a veces el emocionado, otras el sorprendido y donde finalmente creo haberle visto un gesto sincero al final de "Purple Rain". Janelle Monae interpreta "Let's Go Crazy" haciendo de paso un guiño a Michael Jackson en su baile, Esperanza Espalding hace "If Eye Was Your Girlfriend" al contrabajo, Alicia Keys se descalza sobre el piano para "Adore" y la veterana Patti Labelle se quita los zapatos para "Purple Rain". Prince recoge el premio con un sorprendente discurso de humildad: "Fuí bastante salvaje cuando era jóven... y ah... no tienen porque hacer lo que yo hice... no tienen que cometer los errores que yo tuve..."
Personalmente digo que aquellos tiempos son los que lo hicieron grande y los que a mi más me han atraído a su música. No creo que haya nada de lo que arrepentirse, todo lo contrario, tal vez no hubo demasiados errores, a no ser que se esté refiriendo a la disputa que tuvo con Warner. Su nuevo disco "20TEN" se distribuirá gratis durante el mes de julio a través de distintas revistas europeas (de momento ninguna española) con el sello de transporte de... ¡¡¡Warner Bros.!!!

1 comentario:

berarma dijo...

Qué triste, él mismo parece considerarse ya acabado, habla como arrepentido de lo que ha hecho en sus mejores años musicales. Creo que le han comido demasiado el coco. Me apena ver que el autor de Lovesexy haya acabado así, muy mal le han tenido que ir las cosas. En lo personal no ha sido muy inteligente, el dinero y la fama le han dejado ser un niño malcriado, ha estado demasiado desconectado de la realidad, y ahora que se da cuenta de que el dinero y la fama no dan la felicidad se agarra a la religión... qué triste.